Vamos a suponer que yo soy psicólogo o psicóloga de un ayuntamiento.
Vamos a suponer que tengo un novio que es concejal del ayuntamiento.
Supongamos que tengo un perro y se me muere y que, por tal motivo, yo falte a trabajar.
Lo que no es suposición es que sufra tanto por un perro y a la gente las trate peor que a los animales.
Alegorías y alegrías del paisaje isleño
Hace 2 años
0 comentarios:
Publicar un comentario