A propósito de la Ruta del Taginaste Azul.
Soy un enamorado de nuestra flora y nuestra fauna. La conozco y disfruto de todas sus excelencias.
Conozco además cada rincón de nuestra maravillosa Isla, y he participado en infinidad de excursiones con especialistas nacionales e internacionales, para describir, conocer y divulgar las características de nuestra flora.
Durante las reuniones de trabajo que se han mantenido, casi siempre sale a relucir la presencia del hombre y el pastoreo en la conservación de los distintas comunidades.
Debo decir, que el senderismo incontrolado (está ocurriendo con el populismo de esta ruta, la erosión (producida por los caminantes, favorecida por la pendiente del camino),además de otras alteraciones (desvíos, apertura de nuevos atajos, basuras, recolección de material vegetal, interrupción/alteración de fauna, etc.)
hacen que en poco tiempo este maravilloso paraje se vea alterado.
Por eso, quiero advertir a los divulgadores de tal ruta, que están equivocados, que ni el suelo ni las especies vegetales presentes pueden con tanta carga (personas que la visitan).
Hablo con conocimiento, me tomé la molestia de contar los "senderistas", les puedo decir que parecía la cabalgata de reyes.
El medio, nos le va agradecer tanta visita, todo lo contrario y ustedes van a ser los únicos responsables de tanta pérdida, que por desgracia va a ser irreparable y créanme ha costado millones de años para disfrutarla.
Si dudan de mi comentario les invito a leer la cantidad de informes que se han emitido en situaciones similares.
Los pelos se me ponen de punta.
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