736 COMENTARIO IGNACIO MONZON FLORIDO

Amigo/a anónimo/a número 728

Rompiendo con las palabras expuestas por mí el otro día, voy a hacer una excepción con usted.

Por algunas de las referencias que usted da, parece que se refiere a mi, IM, trabajé en el Ayuntamiento y fui despedido, vivo en la parte alta, etc. Por eso me voy a tomar la libertad de contestarle, y desde ya le pido disculpas si me equivoco.

Sin embargo, son otras muchas las referencias que da que no creo que se refieran a mi, pero se lo expongo. Para nada me creo tan inteligente, y tan culto como usted dice, ojalá lo fuera más, para ello estudio, leo, me relaciono con mucha gente más o menos inteligente que yo y de las que cada día intento aprender algo, etc..
En ningún caso me he quedado con las ganas de nada por la sentencia, aunque eso sí seguiremos luchando por nuestros derechos señor/a, aunque a usted le pese. Bueno, rectifico, si tengo muchas ganas de que en este pueblo se respire algo más de libertad, o democracia como decía doña Enélida no hace mucho.
Por último, le garantizo, que la palabra vengar no aparece en mi diccionario. Pero ya no solo esa, son otras muchas, que sin embargo otros sí las tienen, me refiero a rencor, odio, cobardía (hablar desde el anonimato), etc.

Además siento decirle que no soy yo el autor del comentario al que usted responde. Como ve, y habrá visto en comentarios anteriores, yo no me escondo, vivimos en un país y un pueblo libre ¿o no?, ni soy tan culto para poder escribir con las letras árabes o persas y mucho menos saber su significado, además tampoco soy tan "brusco" como el comentario 669, creo que las cosas se pueden decir de otra forma. Por tanto creo que está usted un poco perdido conmigo, además porque por ejemplo, al señor Carreño y su familia, yo particularmente les tengo bastante aprecio desde hace muchos años, desde la época en la que trabajé con él, y a los que desde aquí les mando un saludo, sabedor de que nombrar por aquí a Carreño a algunos les provoca sarpullidos en la piel.

En cualquier caso, como parece que usted me conoce, además de llevar mi vida, sabe donde vivía, donde estudié y saber donde vivo, le invito a mi casa cuando usted quiera y le preparo un café, una cerveza o un vino, lo que usted prefiera, y hablamos sin ningún tipo de problema. Sin embargo si lo prefiere, también le he pasado al administrador mis números de teléfono (móvil y casa) así como mi email, por si quiere hablar algo conmigo. Eso si, por favor, de la cara no sea cobarde, que como dice el dicho “la gente hablando se entiende”.

Por último, como ve, espero no haberle insultado, cosa que sin embargo usted si hace, pero que le vamos a hacer, todos en este mundo no somos iguales, por suerte. Y me reitero, disculpe si se siente ofendido por mis palabras, créame, no es mi intención.

Por descontado, que esta historia llega hasta aquí mientras no se identifiquen tanto usted, como todo aquel que se esconda detrás de un anónimo, por muy honrado que sea amigo/a.

Saludos

(IM)
Ignacio Monzón Florido

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