Es hora de que el PP ponga cordura.
Si mañana se consuma el desatino que quieren cometer los dirigentes de ASAVA, entre ellos su presidente Sr.Juan Carlos Hernández, es porquela dirección del PP a nivel regional también lo permite ,
demostrando que Valsequillo solo le interesa por los intereses y negocios a los que, por otra parte, ASAVA siempre se ha mostrado muy colaborador.
Me resulta incomprensible que la dirección del PP, con la capacidad de maniobra que ahora tiene, no haya explorado otros caminos que no sean una reedición del pacto con ASAVA cara a las próximas elecciones.Esta es una oportunidad única para marcar distancias y alejarse de un socio que les ha perjudicado muchísimo a la hora de gestionar y que, aunque no lo quieran ver, aún lo continúa haciendo, al decidir apoyar actos populistas y ausentes de sentido común.
Con el panorama que se vislumbra en Valsequillo, en el que ASAVA se muestra en caída libre y el propio PP solo es capaz de mantener su techo de votos a pesar de la ola popular que ha barrido España entera, no es lógico que no haya intentado buscar algo distinto a seguir atados a un grupo político cuyo discurso ya no creen ni sus propios votantes.
Cada día que pasa, el PP se deteriora visiblemente por el seguidismo que hace a las erróneas decisiones de su socio, demostrando a los vecinos de Valsequillo que tampoco son una alternativa válida o fiable cara al futuro inmediato si continúan apoyando actos como este.
Si fueran medianamente inteligentes, unos y otros,el esperpento de mañana solo debería servir paradecir a todos los canarios, desde eseemblemático lugar que han elegido, que se han equivocado de plano y que el día 11 de Junio habrá un acto en el Ayuntamiento de Valsequillo para elegir al Alcalde elegido democrática y limpiamente el pasado dia 22 de Mayo.
Me pregunto quién permite que un lugar tan canario, de tanto prestigio y con tanta raigambre en nuestra isla, se preste a este tipo de trifulcas políticas pueblerinas, promovidas con el solo fin de desprestigiar al oponente, crear polémica y sembrar dudas sobre un sistemademocrático que, al parecer, a los convocantes no les viene bien.
Actos de este tipo también desprestigian a la democracia, a los políticos y a la propia entidad que acceda a ser escenario y altavoz de luchas políticas de este tipo. No es de recibo que se autoricen semejantes sainetes en un lugar emblemático y sagrado para la cultura de nuestra tierra, un símbolo para todos los grancanarios.
Un vecino de San Roque
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