Continuacion del comentario 5450 y damos las gracias al autor
Quisiera aprovechar este medio para dar las gracias a quienes durante 11 años para mi, 17 para los que lleven más tiempo, me han hecho disfrutar de uno de los mejores lugares del mundo para comer y para tener unos amigos.
Hoy día 31 de Agosto de 2011 marcará una fecha en mi vida y sobre todo en mi corazón, porque nuestros amigos del Lagar Canario cierran las puertas para siempre. Amigos Juan, David y Domingo, tengo que agradeceros el trato que habéis tenido con mi familia y conmigo en particular. El Lagar Canario no solo ha sido un lugar en el que ir a comer, sino muchas veces un sitio de risas, otras un hombro donde descansar, pero siempre un lugar donde encontrar amigos y además comer bien.
La crisis ha hecho mella en todos, pero siempre tuve la esperanza de que no pasara con ustedes. Jamás pensé que llegaría este día y sobre todo que iba a ser tan duro para mí. Os puedo asegurar que lo que tengo en mi corazón es peor que lo que uno siente cuando se va algún familiar querido, porque como se dice: la familia nos viene impuesta, pero los amigos los elige uno.
Bien es cierto que no se puede buscar culpables en este mundo de los negocios y las empresas, pero entre la crisis y otros motivos que no vienen a cuento, lo cierto es que nos hemos quedado sin uno de los lugares gastronómicos de referencia en nuestra tierra y aquí no hablamos ni de cifras ni de números, hablamos de amigos y de sentimientos que es al final lo que queda.
Como es de importante para mi y para los mios que hasta mi hija de 7 años no paró de llorar al conocer la noticia y ha guardado en su album de fotos un papel que reza “hoy día 31 de julio ha cerrado mi restaurante favorito”, como dice ella “para no olvidarse nunca”.
Tan solo quiero aprovechar estas líneas para darles las gracias a esos amigos que se han preocupado por tantos de nosotros y que nos han tratado como parte de sus familias. Quiero agradecerles tantos momentos inolvidables: cumpleaños, dias de la madre, el bautizo de mi hijo, etc… Os deseo lo mejor donde quiera que vayais.
Es una pena que estas cosas tengan que pasar, pero es cierto que pasan y no por ello me voy a resignar y quedarme como si nada.
Hoy se va un cachito de mi vida con ellos y aunque los seguiré teniendo como amigos por separado ya no los tendré juntos para echar unas risas en El Lagar Canario.
Les quiero, no se olviden de mi que yo jamás lo haré de ustedes.
Mario Navarro
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