ASAVA: sobreviviendo al desconcierto.
Hoy domingo, día de descanso para la mayoría, aunque no para todos, he echado un vistazo amplio a la prensa digital, esa que tan bién maneja el gabinete de Prensa de ASAVA, entiéndase Juan Ojeda, un tipo que escribe y luego se comenta y se hace la ola a sí
mismo.
Algunos comentarios son realmente ilustrativos y muestran el tremendo ingenio de algunos al hacer sus valoraciones sobre la famosa entrevista hecha al presidente de ASAVA y las opiniones de éste sobre los dos casos de despido efectuados por nuestra corporación municipal.
No conozco ningún precedente donde los despedidos, protagonistas principales y máximos afectados expongan públicamente, cada uno a su manera, su punto de vista sobre el asunto y, donde uno de ellos pida a todas las organizaciones políticas que se mantengan al margen
del conflicto, que no hagan uso partidista "ni para bién ni para mal" de su situación y que sean respetuosos con ese deseo.
¿Por qué llegamos a este esperpento? Porque el afectado sabe que los políticos que ahora le
defienden son unos oportunistassin escrúpulos y, porque también saben que lo que un político denostaba hasta ayer por la tarde, hoy por la mañana si le conviene y significa sacar rédito político, lo defiende contra viento y marea, porque "no importa de quién se trate, sino de qué se trate conseguir".
En fin, porque son unos impresentables, sin más.
Una de las opiniones me llamó especialmente la atención. Se insinúa en un comentario aparentemente jocoso, que el presidente de ASAVA se entera por la prensa de sus "propias" declaraciones. Y, créanme, que puestos a reflexionar y teniendo en cuenta como
funciona esa casa, donde todo gira alrededor de un ser iluminado y superior, el comentarista no va muy desencaminado en su apreciación. Parece una filtración desde dentro puesta en circulación como sin querer.
Quizá alguno ya se esté hartando de la mano de hierro que atenaza esa organización política, a la que tiene trincada por el cuello y zarandea a su antojo. La tésis de que ASAVA es Juan Ojeda es cada vez más sólida:
lo que Juan Ojeda escribe va a misa, lo haya dicho o no su presidente, eso va a misa, sí o sí.
Es por ello que, la militancia de ASAVA, mientras siga en manos de este "gabinete de prensa" tan peculiar, tendrá que conformarse con ir sobreviviendo a la incoherencia, a la contradicción y, sobre todo, al desconcierto.
Uno de p´abajo
Alegorías y alegrías del paisaje isleño
Hace 2 años
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