Siempre me ha despertado rechazo, repudio y falta de respeto las personas que haciendo uso de su condición de titulado universitario, se consideran unos ilumimados y mucho más intelectuales.
Por eso Antonio, como yo, está en su derecho de nombrar, citar, leer, estudiar, opinar y reflexionar sobre Unamuno y cualquier autor.
A mí me suena la postura del "fíngido intelectual" a la Millán Astray, mira por donde.
Animo Antonio y a seguir demostrándoles que la educación y la cultura en muchas de las ocasiones está alejada de La Universidad.
Un saludo.
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